El verano le ha sentado muy bien a La ContraCrónica. Sólo en septiembre 265.000 descargas, un récord absoluto hasta la fecha. Desde junio hasta el 1 de octubre la audiencia del programa ha crecido un 25%. No está nada mal para unos meses en los que no suele pasar nada y cuesta mantener un espacio diario con contenido lo suficientemente atractivo. La ContraHistoria, por su parte, está ya en el millón de descargas, 27.000 de promedio por capítulo. Algo de bueno habría de tener no detenerse ni para coger impulso. En agosto el programa se puso a la cabeza en iVoox por encima de los dos principales de la radio española, que tenían a sus presentadores de vacaciones. En septiembre ha vuelto al tercer puesto que sabe a primero porque La Contra la hace un servidor con la inestimable ayuda de los oyentes, que envían a diario sus comentarios, sus preguntas y sus reflexiones.
Todo esto, obviamente, sin los patronos de estos dos espacios no sería posible. Son ellos los que hacen de La Contra una realidad cada mes permitiéndome dedicarme a ella durante todo el tiempo necesario. Todo lo que se lo agradezca siempre será poco.
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