Me llega una nota de prensa de Iberia informándome que van a tirar la casa por la ventana este año con motivo de los carnavales. Aseguran que, en una colección de destinos, los descuentos serán de hasta el 40%… todos, naturalmente, los recoge Liligo.es con la precisión que caracteriza a este buscador. Aunque, claro, lo primero que deberíamos saber es cuando cae el Carnaval este año porque esta es una festividad móvil, como la Semana Santa. De hecho el Carnaval está íntimamente ligado a la Semana Santa. Se celebra cuarenta días antes del Domingo de Resurrección. Entre una cosa y la otra tiene lugar la llamada cuaresma, un periodo litúrgico destinado a la preparación espiritual de la Pascua.
Si este año el Domingo de Resurrección será el 21 de abril no hay más que contar hacia atrás hasta llegar al miércoles de ceniza, que marca el final del Carnaval. Este año el miércoles de ceniza se celebrará el 6 de marzo por lo que a partir de aquí es fácil: martes de Carnaval el 5 de marzo, lunes de Carnaval el 4 de marzo y el fin de semana de Carnaval el 2 y el 3 de marzo. Ya tenemos las fechas.
España es un país muy carnavalero. Casi cada ciudad tiene el suyo con sus peculiaridades que lo hacen único. Los dos más famosos, los que más atención mediática concitan, son el de Cádiz y el de Santa Cruz de Tenerife. Ambos son extraordinarios pero quedémonos con el segundo porque ahí mismo, a Santa Cruz de Tenerife es donde dice Iberia que nos va a hacer el descuento del siglo.
El Carnaval de Tenerife es muy antiguo, se celebra desde el siglo XVII. Ya en tiempos de Felipe III, cuando era tan sólo una aldea de pescadores con poco más de un siglo de vida, se celebraban fiestas de disfraces por esta época. La afición fue a más conforme Santa Cruz crecía y se convertía en un puerto importante, escala necesaria de camino a las Indias. En 1706 una erupción volcánica sepultó el puerto de Garachico, en el norte de la isla, y provocó que las autoridades encargasen la construcción de un puerto en Santa Cruz, hasta entonces una pequeña población dependiente de San Cristóbal de La Laguna.
El comercio trajo población y dinero, el dinero trajo buenos carnavales que pronto adquirieron dimensión nacional y luego internacional. Se convirtió en una celebración tan popular que cuando Franco prohibió los carnavales en 1940 tuvo que hacer una excepción con el de Tenerife, que pasó a denominarse «Fiestas de Invierno». Bajo ese eufemismo los tinerfeños siguieron celebrando el Carnaval como habían venido haciendo desde el siglo XVII.
Al morir Franco recuperó su nombre y siguió creciendo. Hoy es uno de los carnavales más importantes del mundo. Es un carnaval temático. Este año el tema son las profundidades submarinas, el año pasado fue la fantasía, en anterior el Caribe y así sucesivamente. Los chicharreros, que es el gentilicio popular de los habitantes de Santa Cruz, se vuelcan con el carnaval, que es sin duda la fiesta mayor de la ciudad. Si tenemos en cuenta que aquella es la capital de provincia más cálida de España no cuesta demasiado entender que atraiga a tanta gente del resto de España y de todo el mundo. La temperatura media en febrero es de unos 19 grados y no baja en ningún momento del día de los 15-16 grados, un oasis térmico en pleno invierno europeo.
Llegar a Tenerife es fácil. Sólo desde Madrid vuelan cinco líneas aéreas: Iberia, Air Europa, Iberia Express, Ryanair y Norwegian. Son sólo tres horas de vuelo. Eso sí, para carnaval hay que reservar con tiempo porque la ciudad se llena hasta la bandera. Así que ya sabéis lo siguiente: Liligo.es y sólo hay que elegir aeropuerto porque la isla tiene dos, el de Los Rodeos al norte y el Reina Sofía al sur.
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