
El llamado coronavirus de Wuhan ha ocasionado una emergencia sanitaria a nivel mundial. Por de pronto los 50 millones de personas que viven en la provincia china de Hubei se encuentran aislados y tanto en Europa como en América muchos países han cerrado sus puertas a cualquiera que haya estado en China en los últimos quince días. El virus, cuyo nombre es 2019-nCoV no parece remitir. El número de infectados ronda ya las 15.000 personas y se han registrado unos 300 fallecimientos, eso sí, y como rayo de esperanza, hay 328 pacientes curados.
A día de hoy el virus se ha extendido por 24 países de Asia, Europa y Norteamérica, sólo África y Sudamérica se encuentran aún libres de infecciones y esperemos que siga siendo así. Los medios de comunicación, ávidos siempre de noticias impactantes, se están cebando con el tema como ya sucedió con la gripe A en 2009 o el SARS en 2002, un tipo de coronavirus que brotó también en China y que provocó más de 700 víctimas mortales. Como es lógico deben extremarse las precauciones, pero sin entregarse al catastrofismo ni a la xenofobia. No olvidemos que el peor virus que padece China no es el 2019-nCoV, sino su Gobierno.
En La ContraRéplica:
- ¿Pisó Delcy Rodríguez suelo español?
- El referéndum del Brexit y el de autonomía de Galicia
- Alarmismo con el coronavirus de Wuhan
- La financiación iraní de VOX
- ¿Merece la pena adquirir un terminal 5G?
Be the first to comment