
La ruptura de relaciones entre Arabia Saudí y sus aliados con Qatar sacudió los teletipos el pasado lunes. Riad decía haber dado ese paso por el apoyo y la financiación qatarí a grupos islamistas como los Hermanos Musulmanes, pero si Qatar está pringado Arabia Saudí lo está mucho más. La razón de la ruptura es obviamente otra, y tiene que ver mucho más con la guerra sorda que se libra dentro del mundo musulmán y, en concreto, a las orillas del golfo Pérsico.
El monarca catarí debió pensar que en diplomacia lo esencial es tener claro quién es el enemigo ( los sauditas en este caso ) y conchabarse con todos los enemigos conocidos de tu enemigo. Pero no, en diplomacia lo esencial consiste en entender que no hay enemigos sino intereses y que cuantos más compromisos, más ataduras. Ahora que Catar es un conflicto de intereses andante pero encadenado con infinidad de malas compañías, se puede caer con un mal aire. Es lo que tiene jugar al póker, con muchísimo dinero sí, en la mesa de los campeones.
Un cordial saludo.
Curioso el contraste entre tus comentarios sobre Cuba y Venezuela y tus loas sobre el «glamour» de Qatar y las repugnantes teocracias del Golfo Pérsico.
Incluso con la situación que se vive en Venezuela, es un verdadero paraíso de libertades comparado con cualquier asqueroso régimen árabe de esos. No digamos Cuba. Voy más allá: la URSS era un paraíso de libertades comparada con la sharia imperante. Al menos las mujeres tenían más derechos que los perros
Sólo hay que ver fotos antiguas de Kabul con el régimen títere comunista y en la actualidad, «liberado» por Occidente
Pero a muchos liberales hacen bueno eso que dice la izquierda de que realmente son una coartada de las Corporaciones y el dinero. Cuando hay billetes y negocio por medio parece que esa libertad que se loa tanto contra dictaduras comunistas ya no importa
Por eso quizá muchos que antes nos decíamos liberales con la experiencia y los conocimientos estamos dejando de serlo aceleradamente. Y más con esas loas a «nuestros amigos y aliados» que retrasmiten decapitaciones por la televisión pública
Tus loas a la eficaz gestión de Qatar, régimen patrimonialista medieval donde los haya, están fuera de lugar. Sí, se alinean con la hipocresía de Occidente, que manda al Borbón a hacer negociete con las repugnantes teocracias para las empresas de la oligarquía (¡avalado con el dinero de todos los españoles!, ¡una vergüenza!) mientras pone a caldo la dictadura venezolana en el Telediario
Y no defiendo las dictaduras, sólo soy consecuente. Unos son malos, pero los otros son peores
Saludos