
El Gobierno francés ha decidido llamar a consultas a sus embajadores en Estados Unidos y Australia tras la polémica cancelación del acuerdo por el que Australia se comprometía a comprar doce submarinos franceses. El pasado miércoles, el Gobierno australiano informó a su homólogo francés de un nuevo pacto con Washington y Londres para la adquisición de submarinos de propulsión nuclear con tecnología estadounidense, rompiendo así con un millonario contrato firmado con París hace cinco años. La cancelación responde a la decisión de Australia de adquirir submarinos fabricados en Estados Unidos, en vez de los submarinos convencionales que le ofrecían los franceses por unos 50.000 millones de euros.
El acto se ha interpretado en Francia como una “puñalada por la espalda” por parte de un “aliado” y sus reacciones no han tardado en llegar. A última hora del viernes, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian anunció en un comunicado la retirada de sus embajadores por orden del presidente Emmanuel Macron, que por el momento no se ha pronunciado directamente sobre el evento que ha desatado la ira de los franceses. Las autoridades francesas justifican la excepcional decisión diplomática en la gravedad de la decisión tomada por el Gobierno de Australia y su aliado Estados Unidos. Para ellos se trata de una «traición» y alegan que no fueron informados previamente sobre la ruptura del acuerdo.
El primer ministro australiano, Scott Morrison, ha rechazado las acusaciones y alega que Francia conocía la decisión desde el pasado mes de junio. Según Morrison, la decisión de adquirir tecnología estadounidense responde al interés nacional y la defensa de su territorio, en un momento de preocupación por la cada vez mayor influencia de China en la región del Pacífico. El presidente Joe Biden, ha apoyado de forma explícita el paso dado por los australianos. La ruptura del acuerdo supone un duro golpe para la economía gala, uno de los grandes exportadores mundiales de armamento, y pone al rojo la carrera a las elecciones presidenciales, que se celebrarán en abril del año próximo y en las que Macron opta a la reelección.
En La ContraRéplica:
- La equiparación salarial
- Vacunas de nueva generación
- La vacunación obligatoria
Be the first to comment